23 febrero 2006

PLURALIA TV


PluràliaTV es la primera web concebida como un canal de televisión y es una iniciativa de los movimientos sociales del País Valenciano.
QUE QUEREMOS
Trabajar por la transformación social aportando un medio de comunicación abierto y horizontal que utiliza una innovadora tecnología y que se auto construye trabajando en red.
COMO PARTICIPAR
Tú o vuestra organización podéis participar activamente en la elaboración de la web http://www.pluralia.tv/ integrándoos en la red internacional de reporteros y/o patrocinando este nuevo medio.
NUESTRA PROGRAMACION
Somos una ventana para que hablen los pueblos del mundo, porque es posible hacer otra televisión.
Porque queda mucho que denunciar y mucha dignidad por ser conocida.
Participa. Hazte socio. ¡Financia tu televisión!
Recomendado el documental sobre los movimientos sociales en Venezuela, Cálico electrónico y el programa de televisión de Michael Moore.

22 febrero 2006

Santiago Alba Rico II


En las lenguas que conozco, todas mal, “traducir” (tradurre, traduire, traduzir, translate, itzuli, übersetzen) evoca la operación muy física de recolocar una carga, de acarrear un paquete, de transportar y alzar y apoyar en otro sitio un gran piano. También en árabe, donde el verbo “tarjama”, del que se derivan nuestro castellano “trujimán” o “truchimán” o “dragomán”, comparte el campo semántico con “naqala”, literalmente “transportar”, cuya gutural “qaf” central materializa la imagen muy robusta de un camión lleno de naranjas. Creo que los miembros del colectivo Tlaxcala no se sentirán incómodos si me los imagino como fornidos camioneros o mozos de carga (ellas y ellos) que aceptan y se enorgullecen del carácter social tanto de su medio de transporte como del material explosivo que transportan.
El viento que traslada la semilla y poliniza el campo estéril por encima de la valla, ¡es el traductor del trigo!
El río que traslada agua, barcos y limo de un país a otro sin secarse en las fronteras, ¡es el traductor de la vida!
El labio impetuoso que traslada saliva al labio del amante, ¡es el traductor del fuego!
El albañil que traslada ladrillos para construir una casa, ¡es el traductor del empeño!
El estibador que carga fardos en el puerto, el minero que empuja la vagoneta, la maquiladora que transforma trabajosamente el tejido, ¡son los traductores de la potencia cautiva!
El militante que pasa un mensaje, el resistente que transmite una información clandestina, el estudiante que reparte un periódico colérico, ¡son los traductores del límite!
El campesino que transporta armas a las Sierras Maestras del planeta, ¡es el traductor de su pueblo!
El poeta que traslada los nombres comunes de una posibilidad no entrevista, ¡es el traductor del futuro!

20 febrero 2006

Santiago Alba Rico



Creo sinceramente que la filosofía puede hacer muy poca cosa. La conocida frase de Marx según la cual la filosofía, que siempre se había dedicado a interpretar el mundo, tenía que dejar paso a las fuerzas que querían transformarlo, pertenece precisamente a una época, como lo demuestra la propia obra de Marx, en la que interpretar era ya transformar de algún modo el mundo. ¿Cómo transformar en cambio un mundo en el que todo ha sido ya interpretado, en el que el forro del mundo está impudorosamente a la vista? La característica del capitalismo hiperindustrial, de eso que llamamos “sociedad del conocimiento”, es la de que precisamente (lo decía el propio Berlusconi) “la verdad no cambia nada”. Una de las consignas de la postmodernidad, tomada de Nietzsche, era la que invitaba a “seguir soñando sabiendo que soñamos” y esa consigna fue finalmente interiorizada por unas clases intelectuales que en Occidente han sido perfectamente capaces de alinear, como en dos estantes contiguos, sin fricciones ni mala conciencia, el conocimiento del horror y la aceptación del horror mismo. Hace unos días escribía que el capitalismo, que ha sobrevivido a revoluciones y crisis, ha sobrevivido sobre todo al conocimiento, a la publicidad de sus crímenes: eso lo hace casi invulnerable, al menos en los grandes centros urbanos occidentales. Lo sabemos todo y consentimos a todo. En este contexto, ya no se trata, pues, de saber qué son las cosas o cómo funcionan, sino de hacer sentir que nos conciernen. Al final de su vida, el filósofo alemán Gunther Anders aseguraba hacer filosofía a partir de los periódicos, considerando sencillamente inmoral dedicarse en tiempos de guerra a leer y comentar a Aristóteles o Heidegger (a los que, en cualquier caso, hay que utilizar y él utilizaba): “un filósofo que solo escribe para filósofos”, decía, “es tan absurdo como un panadero que solo hace pan para otros panaderos”. La filosofía tiene que aliarse modestamente a la poesía, a la historia, a la novela, al panfleto, para contribuir a conseguir ese efecto del que depende ―y vuelvo a la primera pregunta― la salvación de todos y cada uno de nosotros al mismo tiempo: el efecto de hacernos sentir vulnerables. Ya hemos interpretado todas las cosas, ya está todo a la vista, ya ha subido todo a la superficie: ahora de lo que se trata es de que lo que sabemos nos haga daño. Y de que los dañados ―los damnificados― estemos unidos y seamos cada vez más.

17 febrero 2006

TTT

Tititi titánica titila entre los tilos.
Tititi tiránica tira lo típico.
Tititi titula los títeres como timos.
Tititi timonea los tiempos de tumbos
y los tiñe de tierra, de tigres y de tildes.
Tititi tijera de tiestos, de tinieblas y tifones
me tizna de tirsos y de tiemblos,
tititi, tibia y tierna, me tienta
con timbas, con tintos,
con tirabuzones.
Tititi tina de mi tino, tímpano de ti,
tipógrafa de tipos tímidos como yo,
tirita tiaviva, es tintero de mí.
Tinaja tirada en mis tictacs
tiene tirachinas, tiralíneas,
tisana de mi tiña.
Mi tic, mi toc toc, mi tan.
Tititi, tibia y tierna, me tienta
con timbas, con tintos,
con sus tizones.

14 febrero 2006

Lo lleno (apunte bebido)


Beber bebimos y subimos
en este carromato de la sucia malta.
En este vaso viajamos a lo lleno.
Se calientan los hielos de esos casquetes
que nunca flotaran en el mar de las salivas.
Queremos deslizarnos por los lagos
helados de los ojos de aquellas que no nos miran
Ansiamos tajear su retina
con estos patines que andan oxidados.
Dibujar nuestras siluetas en sus sábanas
y no guardar en las bolsas vacías
el corazón empapado de estos sucios jugos
que recorren las calles.
En este vaso viajamos a lo lleno.
Beber bebimos y subimos
al escote como una cuerda tendida
donde funambulan las miradas
de todos los que cayeron en las redes
de la voluptuosidad secreta.
Beber bebimos y bajamos
al nido de aristas de la ebria mañana.
En este vaso salimos a lo lleno.

13 febrero 2006

La multitud



"Una multitud de estas proporciones es una manera seria de probar a un hombre. Se congrega como testigo de su destino común, en el cual las diferencias personales han perdido toda importancia. Este destino ha consistido, hasta donde se recuerda a sí mismo es una humillación y privación constantes. Sin embargo, sus apetitos no se han atrofiado. Una sola mirada entrecruzada en la multitud revela el alcance de las posibles demandas. Y la mayoría de ellas se quedan sin satisfacer. La discrepancia conducirá inevitablemente a la violencia, tan inevitablemente como inexorable es la multitud allí cogregada. Se ha congregado para exigir lo imposible. Se ha congregado para vengarse de la discrepancia. Tiene que derrocar el orden que, generación tras generación, ha definido y diferenciado a su costa lo posible y lo imposible. Frente a esta multitud, un hombre que todavía no forma parte de ella sólo puede reaccionar de dos maneras. O bien ve en ella la promesa de la humanidad, o bien la teme con todas sus fuerzas. No es fácil ver allí la promesa de la humanidad. No formas parte de ellos. Sólo si estás preparado verás esa promesa."
de "G", novela de John Berger.

11 febrero 2006

Confianzas- Juan Gelman


se sienta a la mesa y escribe
«con este poema no tomarás el poder» dice
«con estos versos no harás la Revolución» dice
«ni con miles de versos harás la Revolución» dice
y más: esos versos no han de servirle para
que peones maestros hacheros vivan mejor
coman mejor o él mismo coma viva mejor
ni para enamorar a una le servirán
no ganará plata con ellos
no entrará al cine gratis con ellos
no le darán ropa por ellos
no conseguirá tabaco o vino por ellos
ni papagayos ni bufandas ni barcos
ni toros ni paraguas conseguirá por ellos
si por ellos fuera la lluvia lo mojará
no alcanzará perdón o gracia por ellos
«con este poema no tomarás el poder» dice
«con estos versos no harás la Revolución» dice
«ni con miles de versos harás la Revolución» dice
se sienta a la mesa y escribe

02 febrero 2006

P-a-l-a-b-r-a-s


Estas palabras, dicción de burbuja
en el océano de manos que balbucean.
Estas palabras, arrancadas de la urgencia
y los diccionarios de los caballos salvajes.
Estas palabras, néctar con ropaje de voz,
retorcidas serpientes de vino,
bragas mordidas que se dicen
como medias ensortijadas en la lengua.
Estas palabras, cajones de alas negras,
ferocidad enfrascada en signos,
goce de gruñido, aullido de uva,
garganta que se deshace como sangre entre las flores.
Estas palabras, golpe de ceniza
de un fuego antiguo, danza de dedos pronunciados.
Estas palabras nos buscan las bocas
como dos perros, como una cama herida
que sangra diccionarios rotos,
como la ducha caliente de los vestidos que se abren.
Estas palabras,
dientes que se hacen fonema,
sonrisas bajo la lluvia de afuera,
apenas copas derramadas, estas palabras
de arcaísmos sublevados,
Estas palabras que nos pueblan de caracoles,
de sabanas en cedazos, de llanuras sin fin,
de prefijos dormidos y lexema tóxico.

01 febrero 2006

El costumbrismo de Pepe Monforte


Crónicas repelladas
El fondo de la fiambrera

Ybarra Olé, Olé y el departamento de logística festiva de la UCA preparan un novedoso invento que revolucionará el mercado del bocadillo y el piscolabis ligero

Primero fue el fondo de armario, una serie de prendas que siempre tienen que estar, como los bomberos, de guardia metidas en los roperos para un por si acaso. Luego vino el fondo norte del Carranza y el fondo del puchero, que es una cosa muy diferente, pero mucho más nutritiva y ahora en la Zona Franca de Cádiz, con un secretismo absoluto, se trabaja en el fondo de fiambrera, un producto que revolucionará, según sus inventores, el mercado del bocadillo y el piscolabis de pequeño porte, definido por los especialistas como el snacking, lo que siempre ha sido comerse un paquete de papa frita, vamó.
Según ha podido saber LA VOZ del Carnaval de fuentes solventes este es el verdadero objetivo de Ybarra Olé, Olé, la gran mayonesera andaluza que compró hace unos meses la antigua Quality Food y que pretende convertir a Cádiz «en la gran fiambrera de Occidente» con el lanzamiento de este producto.
El fondo de fiambrera es un novedoso producto destinado a alimentar a los individuos en situaciones límite festivas, en las que por aglomeración de gente o por aglomeración de líquido en el interior del cuerpo es imposible el desplazamiento colateral hasta un bar y se tiene que saciar la necesidad de jamar sin moverse.
Hasta ahora para estas necesidades tan sólo existía el Kit-kat, pero los ingenieros gaditanos consideran que sacar un kit-kat en medio de un carrusel de coros o en mitad del Rocío resulta de un horterismo absoluto y podría generar en el individuo una peligrosa sensación de ansiedad provocada por las miradas indiscretas de la gente: «miraló, miraló, ese se está comiendo un kit-kat escuchando a Julio Pardo. Qué lo encierren debajo de un losillo, home. Un guardia, que venga un guardia».
Sin embargo el fondo de fiambrera solucionaría todos estos problemas. Se trata de lograr lo imprescindible para comer en el mínimo espacio. Para ello los ingenieros de Ybarra Olé Olé han ideado una microfiambrera fabricada en polietileno expandido de alto abombamiento de tres capas que tiene el tamaño de una lata de atún del consorcio y que puede llevarse en un bolsillo sin ningún tipo de problema. En su interior lleva 3 micropaquetes que contienen productos deshidratados. Se trataría de un microbocadillo de lomo en manteca, un quesito del caserío me fío bajo en calorías con dos minipicos integrales y una cápsula inorgánica pasteurizada de caldo de pollo con fideos. Tras abrir la lata es necesario inyectar aire a soplíos en el bocadillo que se hincha al contacto con la saliva humana que lo rehidrata. Se ha elegido la especialidad de lomo en manteca porque esta variedad de la fauna bocadillera tiene la capacidad de crear una capa protectora de estómago que permite luego soportar mejor la ingesta masiva de manzanilla de Sanlúcar o de Cruzcampo fresquita. Es el famoso efecto cama de los bocadillos de lomo en manteca y que los hace especialmente recomendables para los domingos de coros.
Para terminar de restaurar cuerpo y mente se añaden las microcápsulas de caldo de pollo. Éste se puede tomar incluso caliente echándole a la cápsula un bajío que hace que por simpatía, el puchero se caliente o se ponga que arde si el del bajio se ha tomao tres o cuatro brandies sin hielo (qué asco, Monforte, no sé como puedes escribir estas cosas).
El quesito del caserío se incluye en el fondo de fiambrera en caso de que haya cerca alguna persona a régimen y de esta manera se le puede socorrer el hambre de forma inocua. En el proyecto no sólo trabajan ingenieros de Ybarra Olé, Olé, sino profesores del departamento de logística festiva de la Universidad de Cádiz, un grupo de investigación secreto creado en el Campus de Puerto Real y que está camuflado en medio de los esteros. Este grupo trabaja en lo que se llama «tecnología aplicada al flojo» y que trata de poner en valor técnicas que permitan el mínimo esfuerzo humano. En este sentido trabajan en la introducción de un chip inteligente en los camarones que hace que estos, en cuanto detectan olor a perejil se metan ellos mismos en la masa de las tortillitas, en una especie de harakiri marisquero de gran crueldad, pero de gran comodidad para el humano. Asimismo investigan la posibilidad de lograr la cría del pez espada en filetitos, aunque por el momento han tenido problemas con la reproducción de los filetitos en cautividad.
(...)
Al parecer Ybarra Olé Olé tiene grandes expectativas de venta de su fondo de fiambrera y ahí está la clave de su instalación en Cádiz. La idea de los ingenieros mayoneseros es aplicar este fondo al mercado asiático con una microfiambrera de arró con choco, cuyos primeros text en el mercado chino han sido muy esperanzadores. «Los chinos mastican muy bien el choco y con eso se entretienen mucho» indicó el jefe de la expedición.