20 enero 2007

ESTA NOCHE VOLVIERON ARDIENDO

La carne de cañón de luz, espaldas

en mitad de la niebla y de la noche

barrida por reflectores, huyendo,

regresan al fulgor de oscuras frondas,

son luciérnagas, fugaces estrellas,

el albor de ira de unos ojos, sendas

por los que derivan los fugitivos,

los niños salvajes, niños perdidos,

son hombro con el peso de negros años,

son los que decían que a los desolados hogares

a saquear venían y ganas de vivir,

destellos, palabras, sueños entorchados dejaron.

Son respirando en la palabra encendida,

en la montaña de verbos muertos,

en la sílaba negra que se pierde del rebaño.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Soy Gabriel Calisto, de Argentina. Vi que el 30/12/04 escribiste un post que es un poema sobre alguien que ya no volverá (y hay mucha relación con el fuego). Acá el 30/12/04 fue Cromañon.
Por otro lado, sé que es probable ue te llegue un mail avisandote que comente en tu blog. Si podés, avisame a mi mail (gabrielcalisto@yahoo.com.ar) cada vez que actualices tus blogs.
Desde ya, Gracias por intentar